Friedrich Nietzsche.
Laboratorio revolución (2012) - Pablo Javier Piacente
El concepto de revolución ha tenido múltiples acepciones a lo largo de la historia, y se ha utilizado con los fines más diversos en infinidad de campos de la actividad humana.
Desde movimientos políticos que pregonaban la llegada de un hombre nuevo y perfecto, para lo cual era necesario eliminar a todo lo considerado alejado de ese ideal de perfección, hasta otras corrientes que sostenían que la revolución social era sinónimo de igualdad y colectivismo, y que no debería existir ningún ideal (libertad, progreso) por encima de esa noción comunitaria.
Por otro lado, la revolución fue también abordada desde el arte, con grupos de creadores y pensadores dispuestos a plantear un antes y un después en la historia de la cultura a partir de sus propias concepciones del hecho artístico.
¿Sigue teniendo vigencia hoy la idea de revolución? ¿Cómo se dan las revoluciones en el siglo XXI? ¿No resulta urgente sumar el costado espiritual e interno al concepto de revolución en el seno de la sociedad humana? ¿Podemos seguir desatendiendo y despreciando el impacto de todo aquello que no se ve, no se toca o no se comprueba racionalmente?
¿Hacemos lo suficiente desde nuestra cotidianeidad (aquellos que creemos en la urgencia de una revolución, de un cambio superador) para variar los patrones caducos de comportamiento, los prejuicios que nos afectan? ¿Apostamos realmente por una concepción holística, por la profundidad, la tolerancia, la creatividad y el amor o seguimos cayendo en las redes de la estupidez, la liviandad, la violencia en todas sus formas, la intolerancia, el consumismo, el pensamiento lineal y literal y muchos otros engaños que nos propone la sociedad en la actualidad?
¿Es posible un cambio social si previamente no crecemos como individuos? Claramente es inalcanzable un mundo en constante armonía, porque el caos forma parte del lenguaje del universo, es también parte del crecimiento y no podemos modificar las leyes universales, pero…¿es demasiado aspirar a una realidad más humana, más gratificante y justa para todos y que cree las condiciones para la evolución del hombre en todos los órdenes y no para su involución en muchos aspectos, como sucede hoy?
Estas son algunas de las preguntas que me hago a partir de la presente producción sonora, que combina la música experimental, la poesía y el radioarte, tomando como base una serie de inquietudes, juicios subjetivos e hipótesis, dos poemas de mi autoría y dos fragmentos de discursos políticos.
La idea es disparar nuevas preguntas en cada oyente sobre la cuestión de la revolución en su amplia concepción, y también por qué no algunas respuestas para quien se anime a ensayarlas desde su verdad particular.
El poder pasa ahora a tus oídos y a tu conciencia.
Pablo Javier Piacente.
Santa Clara del Mar, Argentina, agosto de 2012.
Reproducción online:
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-Trabajo publicado bajo licencia Creative Commons — Reconocimiento-NoComercial 3.0
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"Everything is done for love, is beyond good and evil".
Friedrich Nietzsche.
Laboratory Revolution (2012) - Pablo Javier Piacente
The concept of revolution has had multiple meanings throughout history, and has been used for many purposes in many fields of human activity.
From political movements that proclaimed the arrival of a new and perfect man, which was necessary to eliminate anything considered away from that ideal of perfection, to other schools who argued that social revolution was synonymous with equality and collectivism, and not should be no ideal (freedom, progress) above that Community concept.
On the other hand, the revolution was also approached from the art, with groups and thinkers willing to raise a before and after in the history of culture from their own conceptions of art.
Does it still valid today the idea of revolution? How do revolutions occur in the XXI century? Do not add the side is urgent spiritual and internal to the concept of revolution within human society? Can we keep ignoring and neglecting the impact of everything that is not seen, not touched or not checked rationally?
Are we doing enough from our daily lives (those who believe in the urgency of a revolution, a change superador) to vary the outdated patterns of behavior, biases that affect us? We bet? Really for a holistic, the depth, tolerance, creativity and love or we fall into the net of stupidity, lightness, violence in all its forms, intolerance, consumerism, linear thinking and literal and many other deceptions that society offers us today?
Can social change without first grow as individuals? It is clearly a world in constant unattainable harmony, because the chaos is part of the language of the universe, is also part of growing up and we can not change the universal laws, but ... is it too much to aspire to a more humane, more rewarding and fair for all and create the conditions for the evolution of man in all respects and for no involution in many ways, as it is today?
These are some of the questions I ask from this sound production, combining experimental music, poetry and radio art, based on a number of concerns, subjective judgments and assumptions, two poems of my own and two fragments of political speeches.
The idea is to shoot new questions in each listener on the question of revolution in its broad interpretation, and why not some answers for those who dare to try them from their particular truth.
The power will now your ears and your conscience.
Pablo Javier Piacente.
Santa Clara del Mar, Argentina, August 2012.
Reproducción online:
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-Work published under license Creative Commons — Reconocimiento-NoComercial 3.0
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